La Plaza Mayor de Almazán se vistió de gala para recibir a uno de los artistas más internacionales del flamenco español. Antonio Carmona recaló en la villa adnamantina con su espectáculo familiar, deleitando a la vecindad en una agradable tarde-noche con canciones de su repertorio, pero también de los discos que grabó en su etapa con Ketama.