Los jugadores se ejercitan individualmente en sus hogares a la espera de las pruebas PCR de este miércoles
Los jugadores del Río Duero Soria y el técnico Elías Terés se someterán el miércoles al segundo test de PCR. Si los resultados determinan que los jugadores no tienen la enfermedad del COVID-19, el jueves podrían recibir el alta médica y volver a la normalidad. Si se producen las mejores noticias, el viernes se retomarán los entrenamientos grupales que tendrán continuidad con sesiones de fin de semana.
Hasta el momento ninguno de los jugadores ni Terés han tenido ningún tipo de síntomas a excepción del compañero y directivos que están combatiendo la enfermedad. En este sentido, cabe destacar que todos los directivos se encuentran ya en sus respectivos domicilios y en todos los casos se evoluciona favorablemente.
Durante estos días de confinamiento, el preparador Alberto Ruiz ha elaborado sesiones individuales de trabajo físico para los integrantes de la plantilla, que han llevado a cabo en sus casas. El objetivo es el de realizar un mantenimiento de la forma física para que cuando se pueda retomar la competición no se note la inactividad. El control de balón será entonces la principal asignatura, ya que en este periodo no se ha podido trabajar. Por este motivo, si las pruebas arrojan los resultados deseados, el sábado y el domingo se entrenará especialmente esta faceta. Si se cumplen las previsiones más optimistas, el lunes de la próxima semana se planificará una semana de trabajo convencional para preparar el siguiente partido, previsto para el sábado 13 de febrero en Manacor. En este sentido, el hecho de que este fin de semana se dispute la Copa del Rey de voleibol masculino ha propiciado que no haya que aplazar más encuentros y el equipo tenga tiempo para recuperar el tono de cara a un mes que podría concentrar cinco choques en dos semanas.