2020, el año de la Covid-19 ha mantenido la confianza de los usuarios de los Bibliobuses sorianos en el servicio de lectura móvil, así como su apoyo y colaboración ante unas condiciones de prestación del servicio muy restringidas.
El servicio de Bibliobús de la Diputación provincial de Soria registró durante el año 2020 un total de 12.859 visitas y 171 nuevas altas de carnés de lectura, lo que eleva el total de personas usuarias de este servicio a 4.914.
El total de préstamos en 2020, ha sido de 38.756. De ese total, 30.331 fueron libros, 5.463 material audiovisual, 2.959 publicaciones periódicas y 3 documentos electrónicos.
“Cada uno de los préstamos realizados reflejan el firme compromiso de los Bibliobuses de la institución provincial como servicio de lectura pública. Este inesperado 2020 los bibliotecarios han compensado las restricciones a la hora de acceder a la lectura, atendiendo y respondiendo a todas las solicitudes que los usuarios tanto adultos como infantiles han realizado en las visitas, por teléfono, correo electrónico o vía WhatsApp”, ha detallado Milagros Tarancón, Directora del Centro Coordinador de Bibliotecas, quién también ha explicado que este año marcado por la enfermedad Covid-19 el servicio ha sido a demanda, y bajo cita previa con una antelación mínima de 48 horas.
En circunstancias normales, sin ninguna limitación y con libre acceso de los usuarios al interior del vehículo, la media diaria de atención al público en el Bibliobús está en 95,6 préstamos. Pero como consecuencia de la crisis sanitaria generada por la Covid-19, la Diputación provincial frenó su actividad durante más de dos meses. De esta forma, la media de préstamos ha sido de 83,7 libros por día de servicio.
A finales de mayo se retomó lo actividad presencial, “la Covid no ha podido con nosotros que nos hemos adaptado a esta especie de nueva normalidad para seguir con nuestro objetivo de fomentar la lectura en el medio rural”, ha explicado el diputado de Cultura, Enrique Rubio.
Cumpliendo con las pautas y recomendaciones sanitarias, el Bibliobús A reanudó su ruta habitual el día 2 de junio y el Bibliobús B, lo hizo la semana siguiente coincidiendo con la renovación del vehículo.
En cuanto al número de localidades del medio rural de la provincia de Soria visitadas por los Bibliobuses con periodicidad quincenal, ha aumentado a 118, con la incorporación de Orillares que desde el mes de noviembre se sumó a la ruta 7 del Bibliobús B.
Los Bibliobuses, colaboran con asociaciones y organismos mediante préstamos colectivos de sus fondos. De esta forma, en 2020 prestaron 2.161 documentos entre escuelas y guarderías y 975 a asociaciones y residencias.
Los usuarios disponen de toda la información completa sobre los horarios y actividades en la página web de la Diputación, y en la APP gratuita para dispositivos móviles que desde 2017 presta un servicio a los usuarios inmediato y actualizado sobre las rutas, pueblos o lugar donde estaciona el vehículo.
Respecto al fondo bibliotecario y audiovisual de ambos Bibliobuses, se ha incrementado hasta un total de 722 libros, 679 por compra propia y 43 procedentes de donaciones principalmente de la Diputación de Soria. De ellos, 352 corresponden a la sección de adultos; 370 libros a la sección infantil.
Además, se han procesado 206 ejemplares de publicaciones periódicas y también se ha incrementado en 148 ejemplares el fondo de documentos audiovisuales.
La incorporación de todos los documentos se realiza de forma continuada y con la mayor celeridad posible con el objeto de ofrecer una colección actualizada y cumplir con la demanda de los usuarios.
“Si no disponemos de un libro determinado, los lectores lo pueden solicitar”, ha puntualizado Milagros Tarancón.
Actualmente, se mantienen los protocolos sanitarios con entrega y devolución en el exterior del Bibliobús, pautas de limpieza y desinfección correspondientes y cumplimiento del periodo de cuarentena vigente.
Mañana, día 28 de diciembre, se conmemora el Día del Bibliobús y la Diputación provincial recuerda que en 1988 se puso en marcha el primer Bibliobús llevando la cultura a los pueblos de la provincia, y el segundo lo hizo en 1991 acercando de esta forma a los habitantes de los pueblos la posibilidad de acceder a una gran biblioteca con un servicio atractivo y demandado por muchas personas de la zona rural.
