El Balonmano Soria ha alcanzado el liderato del Grupo B tras un trabajado y sufrido triunfo en Gijón ante el RGC Covadonga, en un partido lleno de dificultades pero que terminó con un marcador de 35-40 favorable a los amarillos.
El encuentro comenzó con los sorianos mostrando cierta ansiedad por resolver rápido, lo que provocó errores en ataque que facilitaron goles fáciles para los locales.
Además, la defensa no conseguía frenar las incisivas acciones de Diego Fernández y Méndez, lo que mantuvo a los de Oriol en una situación complicada durante toda la primera parte.
A pesar de los esfuerzos por equilibrar el marcador, los amarillos se fueron al descanso con un desfavorable 18-15, reflejo de la incomodidad que mostraron en la pista.
La segunda mitad arrancó con las mismas dificultades, ahora con el pivote del Covadonga causando estragos en la defensa soriana.
Las diferencias de dos o tres goles se mantenían, pero las sensaciones empezaron a cambiar. Una acertada modificación defensiva y una mayor tranquilidad en ataque permitieron a los sorianos igualar el marcador.
A falta de doce minutos para el final, Balonmano Soria logró ponerse por delante por primera vez, demostrando una intensidad y unas ganas que les permitieron abrir una brecha en el marcador.
El esfuerzo tuvo su recompensa con un 35-40 final que, sumado a la segunda derrota de Zamora frente a un sólido Oviedo, coloca al Balonmano Soria como líder del Grupo B.
Un triunfo de carácter para los de Oriol, que siguen demostrando su fortaleza en una temporada que promete emociones hasta el final.