El consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, ha presentado hoy, en el Museo Numantino de Soria, la exposición temporal ‘Fragmentos de agua y cielo en las cerámicas de Numancia’.
Esta exposición aúna con claridad la función de los museos: conservar los bienes muebles, investigar y comunicar a la sociedad los resultados de este proceso científico.
A partir de los extraordinarios dibujos y pinturas sobre cerámica numantina, obra sin duda de pintores dotados de genialidad y talleres alfareros de gran calidad artesanal, aunque ambos fueran anónimos.
Blanca Jimeno Revilla, doctora en biología y especialista en fisiología de aves, concibió la ambición de identificar las aves representadas. Colaboró con ella Juan Luis Hernández Hernández en la ampliación del estudio el ornitólogo. Fue un proceso complejo, ya que los antiguos pintores sintetizaron o priorizaron unos rasgos sobre otros y esquematizaron las aves reduciéndolas a lo que define sustantivamente a cada especie.
Con los datos y la información que los escritores clásicos transmitieron y la arqueología ha comprobado, el Museo Numantino encargó a arqueólogos investigadores la reconstrucción gráfica del paleoambiente de Numancia, es decir, los contextos medioambientales y ecosistemas en los que las aves representadas vivieron junto con los numantinos.
Durante su intervención, el consejero de Cultura, Turismo y Deporte ha querido poner en valor el papel de los museos de Castilla y León como motor de la cultura en la Comunidad: “Nuestros museos tienen que ser espacios para que las familias disfruten de la cultura mientras comparten conocimiento e intercambian experiencias gracias a proyectos culturales y artísticos centrados en la historia, la cultura, las tradiciones y la etnografía de Castilla y León”.
Las claves de la exposición
Los carteles de la exposición informan del proceso investigador, describen la metodología y detallan cada ave identificada en el ecosistema que les es propio. A través de la comparación de las fotografías con las pinturas se puede comparar el camino de la realidad a la síntesis, a veces casi la abstracción.
De este modo, la identificación de las aves, la definición de sus ecosistemas en las sucesivas estaciones y los datos arqueológicos sumados metódicamente, permiten reconstruir con claridad el entorno en que la vida numantina se desarrollaba e, incluso, los lugares posibles de algunas de sus actividades económicas.
Además, la exposición requiere de la participación del visitante. Individualmente se pueden apreciar los rasgos dibujados y los omitidos, seguir el camino transitado para la definición de las aves, y descubrir seguramente con sorpresa el modo tan delicado con que algunas aves fueron representadas; en otros casos, se apreciará cómo la geometría representada da una quietud y una gravedad a las aves que las sitúa en otro lugar que tal vez no sea la tierra, ni el aire, ni el agua.
La exposición permanecerá abierta del 17 marzo al 1 de octubre de 2023 en este espacio del Museo Numantino de Soria. Una exposición para visitar mediante un lento recorrido entre la biología, tan elocuente ahora gracias a la investigación, y las cerámicas realizadas por nuestros antepasados.