La Junta de Castilla y León destina 9,7 millones de euros al desarrollo de una potente plataforma digital que permitirá la recopilación de millones de datos de la cadena agroalimentaria, su explotación a través de tecnologías disruptivas (internet de las cosas, inteligencia artificial, big data o realidad aumentada) y mejorar, así, la toma de decisiones de todo el sector, desde el productor al consumidor.
En concreto, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, a través del ITACyL, va a contratar el desarrollo, con un plazo de ejecución máximo de 15 meses, de la denominada Plataforma Agroalimentaria en Red (PAN), con la que se busca agilizar el proceso de transformación tecnológica de los eslabones que van desde la producción hasta la comercialización.
El proyecto, el que también participan Castilla-La Mancha y Extremadura y tiene un presupuesto total de 27 millones de euros, consiste en la creación de un espacio de datos compartido que, apoyado en tecnologías como la inteligencia artificial, permita optimizar los diferentes procesos de la cadena de valor, genere competencias digitales estratégicas en todos ellos e incluso favorezca la aparición de nuevos servicios.
Específicamente, la inversión, financiada con fondos europeos del programa Redes Territoriales de Especialización Tecnológica (RETECH) del plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), hace hincapié en la optimización de procesos y en facilitar la toma de decisiones para todos los agentes haciendo uso de diferentes tecnologías que conforman el ecosistema de la Industria 4.0.
Por ejemplo, el consumidor podrá acceder a toda la información sobre la trazabilidad de los alimentos. Los agricultores y ganaderos tendrán un conocimiento más amplio sobre sus costes o la producción esperada para mejorar la toma de decisiones de sus explotaciones. O las industrias agroalimentarias podrán detectar más fácilmente puntos de mejora en sus procesos.
El proyecto PAN se articula en varios paquetes de trabajo o módulos, subdivididos a su vez en varias actividades. Castilla y León, va a participar en ocho de ellos, de los que tres, los relacionados más directamente con la trazabilidad agroalimentaria, la aplicación de inteligencia artificial de forma explicable y la realidad aumentada, los ejecutará en su totalidad.
En resumen, se trata de una plataforma colaborativa público-privada de datos donde se podrán entrenar, ejecutar y mejorar modelos con distintas aplicaciones y usos, fundamentalmente para mejorar la toma de decisiones tanto en la agricultura, como la ganadería o la industria agroalimentaria y también para mejorar los sistemas de trazabilidad.