Esta campaña de la Dirección General de Tráfico (DGT) se llevó a cabo entre el 2 y el 8 de agosto.
En cuanto a los controles de drogas, ha habido 10 positivos en las 52 pruebas realizadas.
Durante toda la semana pasada, entre el lunes, 2 y el domingo, 8 de agosto, en la campaña de la Dirección General de Tráfico (DGT) para vigilar el consumo de alcohol y drogas al volante, el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Soria realizó 2.409 pruebas de alcohol de las cuales 17 fueron positivas, el 0’7%. A dos de estos conductores se les imputó un delito por superar los 0,6 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.
En cuanto a los controles de drogas, que la Guardia Civil realiza a los conductores que muestran algún síntoma que evidencia que han podido consumir alguna de estas sustancias, se hicieron 52 controles de los que 10 fueron positivos, el 19%.
Durante la pasada semana, los agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Soria intensificaron los controles sobre estos factores presente en casi un tercio de los accidentes mortales ocurridos en España el pasado año y en la quinta parte de los de Castilla y León (15 de 81 accidentes mortales). En Soria, en 2019 hubo un accidente mortal en el que el alcohol fue un factor interviniente. En 2020 y 2021, no estuvo presente en ninguno de los accidentes con víctimas mortales.
Para llevar a cabo esta campaña se establecieron diferentes puntos de control a cualquier hora del día con el objetivo de evitar que personas que hubieran ingerido alcohol o hubieran consumido drogas circularan por las carreteras.
Para disuadir del consumo de estas sustancias durante la conducción en todo tipo de vías, Tráfico invitó a los ayuntamientos de más de 25.000 habitantes para que se sumaran a la campaña, con el establecimiento de controles en sus respectivos cascos urbanos. El Ayuntamiento de Soria es uno de los que intensificó durante esa semana los controles de alcoholemia.
Un problema no sólo de Seguridad Vial
El consumo de alcohol o drogas y la conducción es un binomio incompatible tal y como se desprende de la memoria 2020 de hallazgos toxicológicos en las víctimas mortales de accidentes de tráfico realizada por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses. Según dicho informe, de los 597 conductores fallecidos en accidente de tráfico y sometidos a autopsia y análisis toxicológico, 291 (48,7%) arrojaron resultados positivos a alcohol, drogas de abuso y/o psicofármacos, lo que implica un 3,2% más que en 2019.
El alcohol sigue siendo la sustancia más consumida por los conductores fallecidos (20,1%), seguido por otras drogas (20,1%) principalmente cocaína y cannabis, y, en tercer lugar, los psicofármacos (13,4%).
Desde la DGT se insiste una vez más en recordar que la única tasa segura es 0,0% ya que, aún con tasas de alcoholemia dentro de los márgenes legales permitidos, nuestro riesgo de provocar un accidente puede verse incrementado.
La Ley de Seguridad vial fija las tasas máximas de alcohol permitidas para los conductores, así como la prohibición de conducir con presencia de drogas en el organismo. En este caso se está ante una infracción administrativa. Además, se incurre también en un delito si se detecta la presencia de drogas o más de 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.