La Unión Europea ha creado la campaña «Let’s talk Prostate Cancer», en el mes de la salud masculina, el objetivo es informar a los varones de la importancia de la detección precoz del cáncer de próstata.
Alejandro Vázquez Ramos, consejero de Sanidad de Castilla y León, ha mostrado su apoyo a las campañas de concienciación entre la población masculina de Castilla y León sobre la importancia de un diagnóstico precoz en cáncer de próstata, superando el estigma social que lleva asociado esta enfermedad y teniendo en cuenta que el 75 % de los casos pueden remitir con una detección temprana, y que es el cáncer más frecuente entre hombres y el tercero en mortalidad.
Este proyecto surge con la participación de parlamentarios europeos, así como representantes de las principales sociedades científicas y asociaciones de pacientes, la Consejería de Sanidad ha querido participar dando visibilidad al cáncer de próstata mediante la celebración de una jornada científica en las Cortes de Castilla y León.
El objetivo de esta jornada ha sido informar y concienciar a la sociedad sobre el cáncer de próstata, sus tratamientos y sus repercusiones en la vida cotidiana, ya que ese esfuerzo puede contribuir a reducir estereotipos negativos y prejuicios en torno a esta patología tan prevalente, avanzando hacia una sociedad en la que los afectados se sientan apoyados y capaces de enfrentar la enfermedad con dignidad y confianza.
Para el consejero, «esta acertada iniciativa representa un compromiso conjunto hacia la concienciación, la prevención y el apoyo a aquellos que se ven afectados por el cáncer de próstata. Sirve para poner en valor la implicación de los diferentes agentes clave en dar visibilidad a esta patología, y por ende su contribución en la mejora del Sistema Sanitario de Castilla y León».
A su juicio, es esencial reconocer que el cáncer de próstata «no solo afecta la salud física de los hombres, sino que también lleva consigo una importante carga emocional y social, por los problemas derivados de la enfermedad, como son la incontinencia urinaria o la impotencia sexual».
A todo esto se suma la reticencia de muchos hombres a la hora de solicitar ayuda y asumir la enfermedad, lo que puede llevar a retrasos en la búsqueda de atención médica, permitiendo que la enfermedad progrese y que se diagnostique en estados más avanzados.
Actualmente, la innovación en el diagnóstico gracias a los avances tecnológicos ha mejorado la capacidad para detectar el cáncer de próstata en sus fases tempranas y de una forma más precisa.
A pesar de la alta prevalencia de los cánceres de próstata, la tasa de supervivencia es generalmente alta siempre que se detecte precozmente. La supervivencia neta estandarizada por edad fue del 90%, tasa que varía en función de varios factores, entre los que se incluyen el tipo y estadio del cáncer, la edad, herencia, el estado de salud general o la eficacia del plan de tratamiento. Según el Registro Poblacional de Cáncer de Castilla y León, durante el periodo 2011-2016 se notificaron una media de 1.913 casos anuales, lo que refleja una incidencia bruta de 150,3 nuevos casos por 100.000 habitantes.
La Gerencia Regional de Salud dispone de los equipos y tratamientos más avanzados para abordar este tipo de tumor, como la biopsia perineal guiada mediante fusión de resonancia magnética y ecografía transrectal, y está previsto contar con cinco equipos PET-TAC que tendrán la misma cartera de servicios de radioisótopo y prestaciones para todos los pacientes de la Comunidad (con esta tecnología se determina la extensión de la enfermedad y el estudio de recidivas, por lo que tiene un importante impacto en la estrategia terapéutica).
Además, hay una propuesta de ampliación de la cirugía robótica Da Vinci para realizar prostatectomía radical (procedimiento quirúrgico común para extirpar la glándula prostática), que contempla la adquisición de un segundo robot de altas prestaciones en los dos centros asistenciales con mayor actividad asistencial (Hospital Universitario Río Hortega y Complejo Asistencial Universitario de Salamanca), así como otros siete robots, uno en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid y otro en todos los hospitales de nivel II de Sacyl (Zamora, Palencia, Segovia, Ávila, Soria y El Bierzo). Los avances en este campo, con técnicas cada vez menos invasivas, hacen que las complicaciones quirúrgicas sean menores y las estancias hospitalarias más cortas.