Una llamada que se recibía en la sala de operaciones del 112 Castilla y León está tarde, solicitaba asistencia para varias personas que se encontraban mareadas en una vivienda de la calle Sanz Oliveros de Soria. Explicaban que podía tratarse de un escape de gas cuyo origen podría ser una bombona de gas butano.
El centro de emergencias daba aviso de este incidente a los Bomberos y la Policía Local de Soria, al Cuerpo Nacional de Policía, a la empresa suministradora Repsol y al centro coordinador de urgencias (CCU) de Emergencias Sanitarias – Sacyl, que enviaba una UVI móvil y una ambulancia de soporte vital básico.
En el domicilio, el personal sanitario de Sacyl atendía finalmente a tres personas con síntomas de inhalación de gas, una mujer de 78 años a quien se trasladaba en UVI móvil al hospital de Soria. Al mismo hospital y en ambulancia de soporte vital básico se evacuaba también a un varón de 5 años. Y finalmente, se atendía a otra mujer de 48 años, quien se trasladaba más tarde por sus propios medios al hospital.