El Burgo de Osma ha sido la localidad donde más se ha dejado notar Karine, donde se han registrado vientos con rachas máximas de 123 kilómetros por hora. Durante toda la noche, fuertes vientos, aunque no de tanta magnitud, han azotado la provincia, dejando a su paso carreteras cortadas y cortes eléctricos por caída de árboles, así como numerosos daños materiales por desprendimientos y caídas de tejas.