Esta mañana se ha realizado en la Comisaría de la Policía Nacional de Soria un emotivo homenaje en recuerdo a los agentes del cuerpo que fallecieron víctimas de atentados terroristas.
El subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, ha indicado que además de aquellos policías nacionales asesinados por bandas terroristas como ETA o los GRAPO, también es día de recordar a aquellos «guardias civiles, fuerzas armadas, su personal, y muchos civiles que, prestando servicio público o no, fueron asesinados por los distintos grupos terroristas que desde el año 1965 fueron atacando a todos sus miembros».
El Comisario Jefe de Soria, Francisco Moñux, ha indicado que fueron 188 los policías asesinados por grupos terroristas. Uno de ellos, Bernardino Ortega, fue asesinado cuando se encontraba trabajando en las oficinas centrales de expedición del DNI en Madrid el 4 de octubre de 1988 por los GRAPO.
Otra víctima que guardó algo de relación con Soria fue un inspector que murió en el atentado a Carrero Blanco, y que se encontraba como escolta en ese momento. Ese inspector estuvo destinado en Soria en el año 1940. Respecto a aquellos partidos políticos que siguen apuntando a que la banda terrorista ETA sigue aún activa, el Comisario es claro y contundente: «está disuelta».
