Los esfuerzos de estos días de Caja Rural de Soria se centran en la canalización de donaciones y la puesta al servicio de las autoridades sanitarias para lo que puedan necesitar. Carlos Martínez Izquierdo, presidente de Caja Rural de Soria, indica que tras esa primera línea de actuación, se está trabajando en una segunda. Un plan de choque que pueda amortiguar el efecto de esta crisis en la economía soriana. Recuerda que la Caja ya estuvo facilitando la financiación y los créditos en la crisis de 2008, y «ahora lo haremos al igual que entonces».