El Club Balonmano Soria avanza en la pretemporada y juega su cuarto partido amistoso contra Tubos Aranda Villa de Aranda, equipo de División de Honor Plata y formado para pelear por su vuelta a ASOBAL.
Desde el Club aseguran que fue un «partido para sacar conclusiones los técnicos y en los que ya se va viendo la evolución del equipo local. Donde además de recuperar ya a Asier Garmendia, se va notando que ya no pesa tanto la carga de trabajo y las piernas están algo más frescas que en encuentros anteriores».
Una buena imagen en la primera parte, con buena defensa y alguna que otra imprecisión debida a pequeños desajustes en ataque. Todo ello ha hecho que se perdieran balones relativamente fáciles, que los ribereños aprovechaban rápidamente para anotar y mantener la igualdad en el marcador. De este modo, se llegó al descanso con un 15-15 justo.
La segunda parte arrancó con los sorianos más entonados en ataque que los ribereños y ello se convirtió en que los sorianos cogieron una pequeña renta de 4 goles. En ese momento los de Aranda apretaron un poco en defensa y consiguieron enjugar la diferencia, manteniendo el partido igualado.
Hasta que a falta de 8 minutos los visitantes conseguían ponerse por delante en el marcador y parecía que podían romper el partido. Pero con coraje y buenas decisiones en ataque, consiguieron igualar el marcador a falta de 15 segundos. En es emomento, el Villa de Aranda disponía de balón para ganar el partido. Fue en la que califican como «una mala decisión», a falta de 4 segundos, un pase errático cayó en manos de Pablo Rodríguez que desde su esquina defensiva consiguió superar por encima al impresionante Magnol Suárez y sus más de dos metros. Todo ello, para establecer sobre la bocina el resultado final de 30-29 para los sorianos. Con todo, han quedado campeones del II Trofeo Ciudad de Soria.
El Club espera ahora seguir recuperando jugadores lesionados para encarar con cierto optimismo la competición a partir del día 17 de septiembre. Este próximo viernes día 9 se enfrentarán nuevamente a los Ribereños y a sus vecinos del Balonmano Burgos en la ciudad de Aranda.