El Consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla y León, Jesús Julio Carnero, ha afirmado que hay normalidad en el sector, pero se espera más equipos de protección individual para los agricultores, ganaderos y trabajadores de la industria de transformación.
El consejero afirma que «necesitamos hacer una alimentación cuidada y sana, para no ponernos enfermos. Para eso contribuyen los productos de Castilla y León».
Desde el viernes 13, toda la cadena alimentaria se unió. Se permite que toda la industria agroalimentaria trabaje a una. Hay un grupo online para poder trabajar conjuntamente.
El consejero ha destacado que hay «absoluta normalidad» en la transformación de los productos, y que acaban en los lineales de supermercados con normalidad.
Se produce por encima del 100%. Las necesidades van decreciendo por la menor demanda, al estar en su casa los vecinos. También se ha constatado un aumento en la contratación en el sector.
La exportación en muchos casos está paralizada. «Es un factor que afecta desde el punto de vista económico. Desde la Consejería se va a producir una modificación de las bases reguladoras de ayudas económicas, para incluir como preferentes a industrias que tengan procesos que son necesarios ahora en esta pandemia».
El pasado jueves se realizó un encuentro de todas las CCAA con el Ministro de Agricultura. Desde Castilla y León se ha transmitido preocupación por el transporte de agricultores y ganaderos para poder hacer su labor.
Carnero ha señalado que el ministerio tenga en cuenta excepciones en transportes. Por ejemplo, atender una explotación de toro de lidia, o en aquellas circunstancias en las que se tengan que hacer labores agrícolas con numerosos operarios.
También son necesarios EPI’s para las industrias transformadoras.
«No se pueden cerrar las fronteras para los productos alimentarios, que son necesarios para todos» indica Carnero sobre el cierre de fronteras.
También se ha valorado como positiva la petición a Bruselas, para que el plazo de la PAC se amplíe a finales de junio.
Carnero ha explicado que hay un problema con el cochinillo y el lechazo, productos que están muy ligados al sector de la restauración y que se están viendo afectados por el cierre de bares y restaurantes. «Estamos poniendo en contacto a los productores, y viendo que se está promocionando en los supermercados estos productos. Hay ya promociones en supermercados. Se va a llevar a cabo una campaña de promoción de estos productos desde la Consejería».