La sentencia judicial de las medidas cautelares fue recurrida por la nueva adjudicataria del servicio del centro. Ahora el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha adoptado la medida de revocar las medidas cautelares. El alcalde de Soria, Carlos Martínez, indica que esta situación retrotrae al Consistorio a «la casilla de salida. Es verdad que es de difícil cumplimiento, en tanto en cuanto, a la parte de lo que se tuviera que haber empezado del curso escolar en el mes de marzo, según la nueva adjudicataria, pues lógicamente estamos finalizando el mismo con fecha 31 de julio». La situación actual ha propiciado que el Ayuntamiento de Soria requiera a la actual gestora a que abandone de forma inmediata las instalaciones. También se otorga un periodo de notificación a los padres de una semana para salvaguardar sus derechos, y con ello realizar el relevo y el acondicionamiento de las instalaciones por los técnicos municipales. La nueva adjudicataria comenzará su servicio a partir de este mes de agosto.
Martínez ha asegurado que el objetivo del consistorio que preside es que se preste el servicio de Educación Infantil «como centro educativo, con las mayores garantías, que es lo que se buscó en el pliego de condiciones técnicas». También ha realizado una alusión a la presencia de este asunto en los medios: «Han corrido muchos ríos de tinta sobre todo esto, pero creo que al final se garantiza y se da la razón en que el expediente desarrollado por los servicios técnicos municipales es absolutamente impoluto». Ante esta sentencia cabe posibilidad de recurso, pero el regidor afirma que «lo cierto, a nivel práctico, es que comenzaremos un nuevo curso, con nueva gestión, mejorada por las condiciones técnicas que hemos puesto encima de la mesa por parte de los profesionales de los servicios sociales. Comenzaremos el curso, espero, con plena satisfacción por parte de los usuarios que quieran acudir al mismo».