El domingo saltaron todas las alarmas en el Club Atlético Osasuna por dos positivos de coronavirus en dos de sus jugadores promesas, por lo que el filial suspendió todos los entrenamientos hasta nuevo aviso. Los rojillos están pendientes de los resultados de las pruebas COVID para poder disputar su primer partido de la temporada, que estaba previsto para este domingo 18 de octubre en Tarazona.