La Alianza UPA-COAG de Soria reclama a las administraciones que «protejan las tierras de labor de la provincia ante el afán empresarial por las plantas de generación eléctrica».
«Nuestra organización es consciente de que España, junto al resto de los países europeos, tiene el objetivo de que en el año 2030 el 32 % de la energía final consumida provenga de renovables. En este sentido, la Alianza UPA-COAG no es sospechosa en defender la instalación de infraestructuras de energías alternativas si con ello se genera riqueza, bienestar y futuro para el medio rural. Sin embargo no puede ampararse el `todo vale´ y más si detrás de este loable objetivo se encuentra el afán desmesurado de empresas ávidas por hacerse, en muchos casos, con los terrenos precisamente más productivos y cultivables, como precisamente está ocurriendo en las localidades de Trévago, Castilruiz y Matalebreras, donde el parque solar que se está actualmente construyendo afecta a 600 Hectáreas de cultivo afectando muy negativamente a las explotaciones agrarias de la zona».
«Al respecto, la Alianza UPA-COAG de Soria exige a las administraciones competentes un ejercicio de responsabilidad puesto que en Soria y el resto de Castilla y León hay mucha superficie potencialmente útil para instalar plantas de energía renovable que no sea terreno agronómicamente fundamental para la producción agraria».
Añaden que «hay que tener en cuenta que el suelo productor de alimentos está limitado, y que debe ser un patrimonio a defender con todas las herramientas al alcance de la sociedad estableciendo incluso medidas legislativas para preservarlo».
«Todas las previsiones de organismos internacionales apuntan a que la población mundial va a seguir creciendo a corto y medio plazo, y es necesario proteger el terreno para producir alimentos. Además no poner coto a este afán empresarial energético que puede llevar consigo la expulsión del sector de profesionales agrarios puede agravar aún más el problema de despoblamiento en los pueblos de nuestra provincia».
«Nuestra organización recuerda que en Soria se ha perdido en los últimos 30 años miles de hectáreas agrícolas, por lo que deben blindarse los terrenos de cultivo frente la ansiedad privada e incluso el afán de las propias administraciones locales en varias provincias por facilitar grandes instalaciones de energías renovables en todo tipo de terreno rural, puesto que bajo nuestro punto de vista agravaría aún más el problema de despoblamiento en los pueblos».
En ese sentido, la Alianza UPA-COAG de Soria exige que «estas infraestructuras se ubiquen únicamente en terrenos no aprovechables para labores agrícolas, ganaderas o forestales. Además, la organización solicita tanto al Gobierno central como a la Junta de Castilla y León que aprueben líneas de ayudas para la instalación de infraestructuras y placas solares en zonas baldías y terrenos poco aptos para los cultivos, que sirvan para responder a las necesidades de energía de las propias explotaciones agrícolas y de las naves ganaderas».