Este medio día se ha hecho público los 11 finalistas del XIX Premio de la Crítica de Castilla y León. Una selección, a juicio del jurado, especialmente ardua.
En las penúltimas deliberaciones han llegado a tener sobre la mesa hasta 51 libros, de los que finalmente han elegido 11. “Esta deliberación me ha creado insatisfacción porque creo que se han quedado fuera libros muy importantes. Pero también satisfacción porque hay libros muy buenos y muy importantes, también”, ha explicado durante su intervención Gonzalo Santoja, presidente del Instituto de la Lengua de Castilla y León.
Finalistas
Los nombres de los títulos finalistas son:
- Carrusel de sombra de Moisés Pascual Pozas. Editorial Atapuerca
- Días de Euforia de Pilar Fraile. Alianza editorial
- En los prados sembrados de ojos de Antonio Colina. Editorial Siruela
- Hijos del carbón de Noemí Sabugal. Editorial Alfaguara
- Ictus de Rubén Abella. Editorial Menoscuarto
- Irene y el aire de Alberto Olmo. Planeta de Libros
- La pobreza de Antonio Gamoneda. Galaxia Gutember
- Material de contrabando José Gutiérrez Román. Editorial Difácil
- El fondo del cubo de David Refoyo. Editorial Colección Visor de Poesía
- Poema del libro «Ritual de náufragos» de Luis Ángel Lobato. Editorial Cuatro y el gato.
- Todos estábamos vivos de Enrique llamas. Adn Editorial
El `XIX Premio de la Crítica de Castilla y León´ descansa, a juicio de Santoja, en tres virtudes:
- La primera de ellas es que se trata de un certamen equilibrado. “todas las generacioes tiene autores muy importantes”.
- La segunda, todos los autores son castellanos y leoneses.
- La tercera, se le da visibilidad tanto editoriales grandes como pequeñas. “Yo creo en el equilibrio. Existe una armonía generacional, regional y provincial”.
“Entre los finalistas están todos los que están tienen que estar”, ha asegurado César Millán, editor y miembro del jurado.
El próximo 24 de febrero tendrá lugar el fallo en Ávila, en principio de manera no presencial.
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