Es el ritmo de vida que llevaban los detenidos en la Operación Escoba de la Guardia Civil y Policía Nacional en Soria.
Se trata posiblemente del grupo criminal más importante en la distribución de sustancias estupefacientes en la provincia de Soria según destacaba el teniente coronel de la Guardia Civil en Soria. El grupo lo conformaban al menos 10 personas, que son los diez detenidos. No se descarta que haya más personas implicadas. 3 de los detenidos han ingresado en la cárcel de Soria comunicada y sin fianza. El grupo tenía una jerarquía bien estructurada.
En el transcurso de la investigación los objetivos principales han realizado un total de 15 viajes en un vehículo Taxi de la capital (nunca en vehículo propio, asegurándose con ello la inviolabilidad del vehículo en controles policiales, algunos de ellos en periodo de confinamiento por estado de alarma), a las provincias de Madrid y Toledo llegando a traer en sus desplazamientos hasta un total de 40 kg de marihuana, obteniendo de ello un beneficio económico de 80.000 euros aproximadamente. (compraban a 3 euros el gramo y lo vendían a 5 euros el gramo).
En algunas ocasiones han adquirido también varias cantidades de hachis -las cuales a través de colaboradores- introducían al interior del Centro Penitenciario de Soria con destino a un interno de nacionalidad dominicana con el cual tenían comunicación directa. Las sustancias estupefacientes eran introducidas mediante lanzamiento de pelotas de tenis, conteniendo en su interior dichas sustancias y en ocasiones teléfonos móviles de reducido tamaño para facilitar las comunicaciones directas con el interno.
Con el dinero obtenido a modo de beneficios (limpio) los objetivos principales mantenían un alto nivel de vida, muy por encima de sus posibilidades, ya que ninguno de los dos tenía actividad laboral remunerada conocida.
De este modo poseían dos vehículos de alta gama en propiedad, valorados en 100.000 euros, por los cuales pagaron en metálico unos 50.000euros, ropas de marca, alquiler de viviendas, así como la compra de los útiles necesarios para la instalación del cultivo indoor desmantelado en el interior de la vivienda, realizaban viajes de ocio (varios fines de semana) alojándose en hoteles de lujo y alto valor económico, alquilando en uno de estos viajes un vehículo marca Lamborghini por valor de 1.500 euros el día.